En 2007 “El Zacatón”, fue explorado por la NASA y a través de un robot se buscaba conocer su profundidad
La formación geológica de los cenotes ha despertado la curiosidad de científicos, buzos y exploradores, pero sí hay uno verdaderamente curioso es “El Zacatón” ubicado en Aldama, Tamaulipas, considerado el más profundo de México y durante décadas ha desafiado a todo aquel que quiera explorarlo.
Ubicado en el rancho de La Azufrosa, “El Zacatón” es uno de cinco cenotes interconectados, sus alrededores poseen una vegetación exuberante que permiten darle toques de azul y verde al agua, quienes lo hay explorado aseguran que una vez cerca se percibe un fuerte olor a azufre.
También conocido como Poza Verde o Poza Azul, este cenote es considerado la cima llena de agua más grande del mundo al asegurar que su profundidad rebasa los 339 metros.
HUMANAMENTE IMPOSIBLE DE EXPLORAR
Llegar a “El Zacatón” es sencillo se puede hacer en automóvil, partiendo de Tampico se recorrerán dos horas en carretera y estando en el municipio se podrá realizar senderismo para apreciar la fauna y la flora.
Al concluir el recorrido se podrá llegar al también conocido como pozo natural y apreciar la maravillosa vista que el terreno por encima del vacío regala, pero de ingresar a explorarlo pocos han vivido la experiencia.
De acuerdo con los registros de Aldama la primera persona en marcar un récord mundial de profundidad fue la Dra. Ann Kristovich quien alcanzó los 168, 859 metros en 1993. Al año siguiente en 1994 Jim Bowden en compañía de Sheck Exley se dieron a la tarea de superar la hazaña.
El primero en realizar la intervención fue Bowden quien marcó un nuevo récord mundial al alcanzar 281.94 metros; sin embargo, Sheck Exley no corrió con la misma suerte y falleció a una profundidad de 267. 91 o 276.14, aproximadamente.
LA NASA SUMERGE ROBOT EXPLORADOR
La erosión de la piedra caliza debido al azufre, las incontables experiencias de explorarlo para conocer su profundidad y más llevaron a la NASA a realizar el envió de un robot en 2007 con el fin de conocer la profundidad exacta.
El encargado de hacer la medición fue el Deep Phreatic Thermal Explorer, una máquina que pesaba 1500 kilos y estaba hecha de 100 sensores y 16 computadoras (capaz de conducirse y tomar decisiones por sí misma); mismo que descendió hasta topar su fondo y registrarlo en 1099 pies.
Es importante mencionar que la NASA eligió este lugar como sitio de pruebas para los robots en desarrollo, entre ellos el que contemplan utilizar para la exploración de la luna joviana Europa; logrando así reconocer este sitio ubicado en Tamaulipas como el cenote más profundo de México.
Fuente: El Sol de Tampico