Las autoridades atribuyen las desapariciones como consecuencia del incremento de la disputa entre cárteles en esta región, por las estratégicas ciudades fronterizas de Tamaulipas, por donde se cruza droga y también miles de migrantes, un negocio que ahora compite con el narcotráfico.
Saltillo, Coahuila, 28 de junio (Vanguardia).- Este año, más de 100 personas se encuentran en calidad de desaparecidas después de iniciar su viaje de tres horas en automóvil entre Monterrey y Nuevo Laredo, en un tramo de carretera muy transitado que los medios de comunicación locales han bautizado como “la carretera del terror”.
En la carretera fronteriza Monterrey-Nuevo Laredo han desaparecido tanto ciudadanos mexicanos y de Estados Unidos, como consecuencia de un recrudecimiento de la violencia por la disputa de los grupos criminales y la llegada del poderoso Cártel Jalisco Nueva Generación a la región.
Tras las balaceras y desapariciones, el norte de México está volviendo a los días oscuros de la guerra contra el narcotráfico de 2006 a 2012, cuando los pistoleros de los cárteles solían atacar tanto a personas comunes y corrientes como entre ellos mismos.
El sábado, la oficina del FBI en San Antonio, Texas, publicó un boletín solicitando información sobre la desaparición de Gladys Pérez Sánchez, una mujer de Laredo, Texas, su hijo de 16 años y su hija de nueve, quienes fueron vistos por última vez el 13 de junio cuando tomaron la carretera.
Las fiscalías estatales de Nuevo León y de Tamaulipas anunciaron que ya abrieron carpetas de investigación para “esclarecer los hechos”.
Las comandancias de la Cuarta Región Militar y Séptima Zona Militar, informaron que “esta estrategia tiene como finalidad implementar la seguridad de la carretera federal No. 85 en el tramo Monterrey-Nuevo Laredo, de forma permanente durante las 24 horas del día, con lo cual se busca eliminar las actividades delictivas que se han presentado en esta importante vía de comunicación”.
ZONA DE CÁRTELES
Las autoridades atribuyen las desapariciones como consecuencia del incremento de la disputa entre cárteles en esta región, por las estratégicas ciudades fronterizas de Tamaulipas, por donde se cruza droga y también miles de migrantes, un negocio que ahora compite con el narcotráfico.
Un vocero del Grupo de Operaciones Especiales de la policía del estado de Tamaulipas contó a Efe que en Nuevo Laredo existe una guerra soterrada por el arribo del todopoderoso Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Precisó que el capo del Cártel del Noreste (CDN, antes Zetas) Juan Gerardo Treviño Morales, alias “el Huevo”, recién se alió con Fausto Isidro Meza Flores, “El Chapo” Isidro, actual líder de Cártel de los Beltrán Leyva, para frenar el ingreso del CJNG a Tamaulipas.
“El CJNG está penetrando en alianza con la fracción del CDG (Cártel del Golfo) que controla la frontera”, precisó el efectivo del Grupo de Operaciones Especiales, que prefirió guardar el anonimato.
Ahora los antiguos Zetas del CDN están de cacería en el tramo Sabinas a Nuevo Laredo y mantienen un retén en la entrada a Nuevo Laredo durante la madrugada, añadió.
SICARIOS PRESUMEN CAMIONETAS ROBADAS
En redes sociales circula un video donde se observa a miembros del Cártel del Noreste mientras revisan las camionetas que presuntamente despojaron a ciudadanos en la carretera Monterrey-Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas.
Sobre un terreno baldío, con una construcción en obra negra y rodeado de árboles se observa a integrantes del CDN mientras revisan y sustraen las pertenencias de los vehículos que robaron a familias que transitan por Nuevo Laredo y por la carretera Monterrey-Laredo.
“Hey, ¿qué es es madre, tu Gordo?”, dice el encargado de realizar la grabación, mientras un sicario vestido de verde, con pantalones y botas color café, revisa la cajuela de una camioneta roja, donde se logran observar algunas bolsas y maletas pertenecientes a las familias hurtadas.
A lo lejos se observan otras cinco camionetas, dos grises, una azul marino, una negra y otra blanca, todas con las puertas abiertas y siendo inspeccionadas por los presuntos sicarios.
Los presuntos delincuentes portan armas largas y se encuentran reunidos en torno a una mesa de cemento, compartiendo golosinas y comida chatarra mientras son grabados.
Alrededor de 70 a 100 personas han desaparecido en esta zona que colinda con el estado de Nuevo León, así como un sin fin de asaltos y cobro de cuota, en donde los sicarios interceptan vehículos particulares y tranaportes de carga.
Ayer fueron difundidos videos donde se aprecia a ciudadanos mientras son despojados de sus vehículos en la carrretera Monterrey-Nuevo Laredo.
Ante estos delitos, las autoridades de Nuevo León recomiendan a los ciudadanos no viajar debido a la inseguridad que se vive en esa zona.
FUENTE: Aristegui Noticias